Entrevista de trabajo
En el post anterior os dimos una serie de consejos para tener en cuenta antes de presentarnos a una entrevista de trabajo. Pero, además de la preparación de ésta, también existen una serie de detalles importantes que debemos tener en cuenta mientras estemos en la entrevista de trabajo:
- No mentir: ante todo debemos ser sinceros ya que, como dice el refrán “Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo”. Mentir es una de las cosas que nos puede cerrar la puerta de manera definitiva y por eso es importante que nos mantengamos lo más sinceros posible.
- Mostrarnos claros y confiados: la confianza en nuestra persona siempre es una característica deseable. Mostrarnos confiados dando respuestas claras y manteniendo el contacto visual con nuestro interlocutor es una de las claves durante toda entrevista de trabajo.
- Cuidar el lenguaje corporal: además de tener dominado el lenguaje verbal debemos prestar también mucha atención al lenguaje no verbal ya que puede jugarnos una mala pasada. Lo correcto es sentarse recto en una silla en una actitud clara de interés, si nos sentamos recostados puede dar la sensación de que estamos aburridos. Debemos evitar mover mucho las manos o hacer movimientos repetitivos con ellas ya que puede indicar nerviosismo.
Además, debemos mantener la mirada en nuestro interlocutor y no evitar la suya, sonreír de manera habitual y hablar con corrección.
- Ojo con la vestimenta: otra de las cruces a la hora de hacer una entrevista es la vestimenta. Evidentemente, no debemos ir a una entrevista de trabajo vestidos de cualquier manera ya que la primera impresión es de suma importancia. Lo ideal sería poder evaluar el tipo de ambiente en el cual vamos a realizar la entrevista para saber el grado de formalismo que tenemos que utilizar al vestir: no es lo mismo ir a una entrevista en una multinacional que a una entrevista como profesor de educación primaria. En cualquiera de los casos deberemos cuidar nuestro vestuario pero en el segundo de ellos podremos ir un poco menos formales.
Habitualmente se suelen seleccionar colores poco llamativos (tonos beigue, rosa pálido, azules oscuros, negros) y prendas de vestir (pantalones con pinzas, blusas, etc..).
- Cuidar nuestra higiene personal: otra parte de nuestra apariencia es la higiene personal. Ni que decir hay que debemos estar perfectos a la hora de presentarnos a una entrevista de trabajo. Esto implica que debemos ir arreglados, en el caso de las mujeres utilizar maquillaje pero que sea natural, llevar las uñas limpias, los zapatos limpios, etc…
- Mostrar conocimientos acerca de la empresa: Finalmente, debemos mostrar que conocemos y compartimos la cultura de la empresa en el caso de que nos pregunten directamente o surja una cuestión en la cual podamos compartir esta idea. Evidentemente esto implica un estudio previo para conocer correctamente la empresa a la cual queremos pertenecer y el puesto al cual estamos postulando.
Todos estos consejos os resultarán de suma utilidad y pueden serviros para llevar a cabo una entrevista perfecta.
