Estudiar para un examen

Estudiar para un examen

Las épocas de exámenes suponen un momento de gran estrés para todos aquellos que lo viven, independientemente del tipo de examen que sea o de la dificultad de los estudios a los cuales nos estemos enfrentando.

 Habitualmente llevamos a cabo una serie de practicas y rituales antes de enfrentarnos a uno de estos duros momentos pero, muchas de esas pautas, mas que ir en nuestro beneficio van en detrimento de nuestro funcionamiento posterior. Conocer que es lo que mejor puede funcionarnos para afrontar un examen con éxito y que no es una de las claves que puede ayudarnos a modificar nuestras tácticas y a obtener unos mejores resultados.

  • Repasar antes del examen: es una de las practicas más habituales aunque, realmente, aporta más en nuestra contra que a nuestro favor. Aprovechar para repasar hasta minutos antes de un examen no hace que adquiramos más información, sobre todo si es algo que no hemos estudiado previamente puesto que el lapso de aprendizaje es muy corto. En estos casos, lo mas probable es que consigamos confundir a nuestra mente y generemos una interferencia de información con aquella que ya habíamos adquirido previamente, pudiendo generar problemas a la hora de hacer el examen.
  • Estudiar el día antes del examen: una costumbre muy extendida es la de estudiar solamente el día antes del examen lo cual fatiga mucho a nuestro cerebro y hace que el aprendizaje ni sea adecuado. Lo correcto sería dedicar una hora al día al estudio o, si se carece de tiempo para ello, dedicar al menos algún día en semana para ir repasando la información que vamos adquiriendo en clase ya que, de esta manera, nos garantizamos ir adquiriendo el conocimiento sin tener que llegar a realizar un sobre esfuerzo mayor de manera previa al examen.

 En próximos posts seguiremos abordando otra serie de tácticas saludables para el estudio.