En anteriores posts ya hablamos acerca de la importancia que tienen las relaciones con los compañeros de trabajo y como estas pueden influir en nuestro día a día. Pero, tan importante como conocer cómo puede afectarnos una mala relación en el trabajo es saber cómo debemos “luchar” contra esas relaciones tóxicas.
Precisamente hoy os traemos una serie de consejos que pretenden ayudaros en este sentido y daros los recursos suficientes como para poder gestionar las “crisis” laborales de una manera más efectiva.
- No te dejes llevar por los nervios: Lo primero que debemos tener en cuenta es que el temple es una muy buena característica. No debemos dejarnos llevar por los nervios ni alterarnos demasiado cuando haya algún tipo de trifulca dentro de nuestro entorno laboral. Debemos tener en cuenta que son personas con las cuales vamos a tener un contacto diario y, precisamente por ello, es mejor tratar de evitar tener problemas o crear malos climas que puedan persistir.
- Conversar es mejor que actuar: Entonces, ¿Qué debemos hacer cuando surge un conflicto? Lo principal es tratar de solucionarlo haciendo uso de la conversación dado que así evitaremos que el conflicto se haga aún más grande. En el caso de que la conversación falle tendremos que recurrir al uso de otras estrategias teniendo en cuenta que la mejor opción no va a ser nunca utilizar la violencia, ni física ni verbal.
- Intenta eludir las provocaciones: Muchas veces, si el conflicto persiste lo mejor es tratar de eludir las provocaciones que puedan realizarnos. Recordemos el refrán que dice: “A palabras necias, oídos sordos” dado que se ajusta muy bien a este caso y podrá librarnos de futuros problemas en el entorno laboral.
En próximos posts seguiremos ahondando y repasando algunas de las claves que van a resultarnos útiles para evitar los conflictos laborales.