Marca personal

En los últimos años hemos podido observar un cambio claro de paradigma en el mercado laboral. Como ya os hemos comentado en anteriores ocasiones, dicho cambio ha tenido que venir con la crisis económica experimentada a nivel mundial.

Esta modificación a la hora de buscar trabajo ha traído muchas consecuencias consigo. Las dificultades experimentadas a la hora de tener acceso a un puesto de trabajo han forjado nuevas maneras e enfrentarse a las entrevistas, de presentar nuestro currículum y de afrontar la búsqueda de un nuevo empleo.

Entre esas nuevas «herramientas» de búsqueda de empleo destacan multitud de claves que nos hacen distinguirnos frente a otros candidatos. En un mundo en el cual existe mucha demanda de trabajo y poca oferta, debemos tratar de hacer destacar nuestra candidatura por encima de las del resto.

Pero, ¿cuál es la manera más acertada para destacar? En los últimos tiempos se ha hecho mucha alusión al concepto de marca personal y todo lo que el conlleva. Este concepto está relacionado con todos aquellos atributos que nos hacen diferenciarnos de otra persona, que hacen que seamos especiales y únicos. Por tanto, dicho concepto no engloba solamente aquellos conocimientos que nos puedan convertir en mejores candidatos sino también aquellas características de nuestra personalidad que nos confirman como un ser humano distinto, con su propia personalidad y su poco carácter.

Actualmente, crear nuestra propia marca personal es una de las alternativas que más se valora. Cada vez son más las personas que quieren desarrollarse, mostrar aquello que pueden ofrecer y generar una imagen de sí mismo atractiva, que pueda «venderse» a la empresa para conseguir un empleo adecuado.

La importancia de la marca personal la tendremos en cuenta en otros posts próximamente. La diferenciación se ha convertido en una de las llaves para encontrar un buen empleo y volver a participar en el mercado laboral de manera que no podemos pasarla por alto ni desmerecerla. Aprendamos a diferenciarnos para desarrollarnos de cara al futuro.